Katrina, recién graduada de la preparatoria, empieza un trabajo de verano como masajista NURU y se encuentra inesperadamente con Rick, su exentrenador de porristas. Inicialmente, le sugiere que busque a otra clienta para evitar situaciones incómodas, pero Katrina insiste en que no hay problema, ya que se identifica como lesbiana. Sin embargo, durante el masaje, experimenta una excitación inesperada que la lleva a cuestionar su sexualidad. Rick la ayuda a gestionar estos sentimientos y se ofrece a guiarla en su primera experiencia sexual con un hombre, despertando su curiosidad por explorar sus nuevos deseos.